El uruguayo, quien se erró un penal en la definición de su selección contra Brasil en las semifinales de la última Copa América, fue presentado como nuevo jugador del club y aseguró que se quiere quedar por mucho tiempo: "Vine para quedarme acá, no pensando después en irme a otro sitio".
Además, recordó un vieja pelea con su ahora entrenador, Lucas Alcaraz: "Ocurrió en el túnel de vestuarios de El Sadar. Nos puteamos un poco".
El mediocampista llega a préstamo procedente del Real Madrid, donde ha jugado 22 partidos.
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